Ph. D. Arturo Andrés Pacheco Espejel.
Profesor Investigador del Departamento de Administración de la UAM-Azcapotzalco.
En la práctica directiva de las organizaciones en nuestro país, tanto públicas como privadas y sociales, existe una serie de mitos que la enturbian; por ejemplo, se piensa equivocadamente, que todas las organizaciones son iguales, y por ende, que los problemas organizacionales se resuelven aplicando técnicas universales e infalibles. El peligro radica en que, como sabemos, la manera en que se dirige a una organización depende directamente de la forma en que se le conceptualice.
Para entender adecuadamente la naturaleza de las organizaciones, es importante tomar en cuenta las siguientes premisas: Primera: Las organizaciones son constructos sociales, es decir, son creadas y recreadas todos los días, a través de las relaciones entre los actores organizacionales (internos y externos), los cuales poseen raciocinios, intereses, interpretaciones, valores, sentimientos, etc.; con todo lo que ello implica. Segunda: en el mundo de las organizaciones, aunque todas poseen estructuras y componentes similares, su funcionamiento es diferente debido a su origen, historia y condiciones particulares en que se encuentren, y por lo tanto, sus patologías son diferentes. Tercera: Todos los actores organizacionales son, sin duda, responsables de lo que sucede en una organización, pero no todos cargan con la misma responsabilidad; así, resulta fundamental reconocer que los directivos tienen una mayor responsabilidad de lo que suceda o deje de suceder en la organización, por una simple y sencilla razón: son los encargados de definir los objetivos y de hacer lo necesario para que se cumplan. Así, muchas de las deficiencias que padecen las organizaciones y que les impiden alcanzar cabalmente sus objetivos, tienen su origen en problemas de dirección. Sin embargo, no cualquier individuo puede ser un buen directivo. El buen directivo “se hace”; es decir, se forma partiendo del conocimiento teórico, tanto de la naturaleza del ente social que va a dirigir como de lo que significa el proceso mismo de dirección.
Nuestra propuesta de Dirección Integral y de Alineamiento Directivo no pretende ser ningún “producto milagro” para hacer competitivas a las organizaciones ni para elevar de la noche a la mañana su rentabilidad, su competitividad y su productividad. Lo que propone es, justamente, “mirar” a la organización en toda su integralidad y aplicar una herramienta metodológica para alinearla con el fin de que esté en mejores condiciones para enfrentar los problemas inherentes a su funcionamiento cotidiano. Recordemos que sólo se puede dirigir bien lo que se conoce bien, y sólo se puede conocer bien lo que se teoriza bien.
Directivos de la Alta Dirección y Mandos Medios de organizaciones públicas, privadas o sociales.
Introducción y encuadre del Curso.
Tema I: La naturaleza de las organizaciones.
Tema II. El proceso de Dirección Integral de las organizaciones.
Tema III. El Directivo integral.
Tema IV. Metodología General para el Alineamiento Directivo de las Organizaciones.
Tema V. Taller para la elaboración del Diagnóstico Exprés de Alineamiento Directivo.
Conclusiones.
10 horas en dos sesiones de 5 horas cada una.
20-25 asistentes.
Av. Central 44 y 46 Despacho 1 Colonia, Rústica Xalostoc, C.P. 55340. Ecatepec de Morelos. Estado de México.